El entrenador del Bayern Munich fue despedido para “evitar una catastrofe en la Copa de Campeones Europeos”, según explicó Kart-Heinz Rummenigge.

A Magath no lo van a llorar en Munich, él fue en sus dos años y medio al frente del club más importante de Alemania tan práctico como seco, tan exitoso como distante, tan realista como carente de humor.

El entrenador era famoso por evitar mirar a los ojos a aquellos jugadores que no tenía en la lista de titulares, por sólo hablarle a aquellos que pensaba mandar al terreno de juego, por cerrar las puertas a los diálogos directos y sólo informarse de lo que pasaba con los futbolistas a través de las noticias de los diarios y los chismes de restaurante.

El blog se dio a la tarea de analizar quien resulta beneficiado y quien perjudicado del relevo en la dirección técnica del Bayern Munich.

Los latinos ganan.

Roque Santa Cruz, Martín Demichelis, Lucio y demás nunca se contaron dentro de los favoritos de Magath, que la verdad sea dicha no tenía favoritos. Los latinos nunca lograron descifrar la huraña personalidad del entrenador ni comprender su falta de calidez humana; que él fuera tan imprevisto tampoco ayudó. “Uno nunca sabe con él a que atenerse” fue una de las frases estándar de los latinos durante la era Magath.

Claudio Pizarro pierde.

El peruano, pese a ganar por ser latino, es uno de los grandes perdedores con la partida de Magath. El hasta hoy entrenador del Bayern, en contra de los intereses financieros del club, mantuvo a Pizarro como titular a pesar del mano a mano en torno a la renovación de su contrato. Jugando, gracias a las decisiones del técnico, Pizarro contó con una plataforma publicitaria de la cual sólo podía salir beneficiado: el Bayern estaba obligado a hacer todo lo posible por mantenerlo en el club mejorando su oferta salarial o dejarlo ir a un club que podía verlo fecha tras fecha. Con Hitzfeld Pizarro puede despedirse del plantel titular, ya con él en el pasado le tocó “chupar” banco.

Lukas Podolski gana.

Que Magath favoreciera a Pizarro en la titularidad sólo lo entendía él mismo y el delantero peruano. Las directivas del club se tiraban los cabellos, aunque se abstuvieron de intervenir, cada vez que al ver la alineación comprobaban que la estrella del fútbol alemán del momento, y más importante inversión del Bayern en el futuro, escasamente aparecía en la lista de sustitutos. Hitzfeld seguramente respetará la política del club dándole preferencia al que se queda (Podolski) que al que se va (Pizarro), al fin y al cabo el nuevo entrenador es conocido por tener claro quien paga su sueldo.

Julio dos Santos pierde.

El paraguayo cedido en préstamo al Wolfsburg y actualmente recuperándose de una lesión en Munich tenía previsto regresar al Bayern y contaba con el respaldo de Magath, su gran protector. Hitzfeld en cambio no lo tiene en sus planes ni presentes ni futuros; la carrera de dos Santos va llegando a su fin.