Montag, 29. August 2011

La “explosiva” autobiografía de Philipp Lahm (Comentario)

Ustedes ya leyeron aquí algunos de los apartes de la autobiografía de Philipp Lahm, capitán del Bayern y de la selección alemana; creo que es oportuno que aproveche ahora –en una semana dominada por el equipo nacional que el viernes va por el punto que lo clasifica a la Eurocopa 2012- para contarles que al lateral se le fue la mano con sus afirmaciones.

Quiero empezar contándoles mi percepción muy particular de Lahm cada vez que cruzo caminos con él, algo que sucede (sucedía) regularmente dada mi cercanía con el Bayern. El capitán alemán es una paradoja de las leyes de la física: alguien que habla con los demás desde una altura que su cuerpo no tiene, que usualmente (con su ego y pretendida superioridad) mira a la gente a su alrededor, y se refiere a ella, de arriba hacia abajo, muy a pesar de que su estatura lo obliga a lo contrario, a mirar de abajo hacia arriba (con los ojos).

Espero haber dejado en claro de qué se trata: de una excesiva convicción en si mismo y sus cualidades y virtudes, y lo que es peor, una excesiva convicción de que los demás (la mayoría por lo menos) podrán superarlo en estatura, pero no por ello le dan la talla.

Estoy hablando de un jugador de fútbol que sin completar los 30 años, tampoco los 29, mucho menos los 28, pretende elaborar juicios de valor sobre su entorno en la creencia absoluta de que ya tiene la experiencia y la sabiduría para hacerlo.

Yo no entiendo los motivos del libro de Lahm, pues conozco esas autobiografías tempranas de los famosos en los siguientes casos:

- Aprovechar los 5 minutos de gloria que se tienen antes de que se agoten
- La necesidad de dinero
- La sed de reconocimiento público

Pero con el capitán no aplican estas condiciones; su gloria no es de 5 minutos, dinero no necesita, y el reconocimiento público –por demás positivo, por lo menos antes de conocerse su autobiografía- lo disfruta.

Yo sólo me explico el libro como un error de cálculo de un jugador que todo lo planea; o como un cálculo muy bien hecho para transformar su imagen de “niño bueno” a la de un hombre a lo “vaquero del viejo oeste” dispuesto a sacar sin contemplaciones su “revolver” en forma de declaraciones valorativas sobre los demás.

Pero lo cierto es que Lahm, que ya se disculpó ante todos por lo dicho, a pesar de que respalda su libro y dice que lo volvería a escribir como lo hizo si le tocara, olvidó que es el actual capitán del club más importante de Alemania, además de la selección de su país, y como tal le cabe una responsabilidad que no es la misma que la de los periodistas o los analistas, pues estos sí están en el fútbol para expresar sus opiniones.

Para citar sólo un ejemplo del poco tacto de Lahm, basta recordar cómo trató a Rudi Völler, el entrenador que llevó a Alemania a ser subcampeón del mundo del 2002, lo más cerca que la selección ha estado de reeditar un gran título internacional, el que lo introdujo a la selección, el que le permitió debutar, el que le regaló su confianza.

Y claro, el libro (que yo aún no leo completo, salió apenas hoy a la venta) podrá ser mucho más que los pasajes que publicó el diario Bild, pero entonces me preguntó ¿por qué una cooperación de promoción de la autobiografía con una publicación sensacionalista habiendo otros muchos periódicos de un formato más serio e intelectual –de lo que presume Lahm- con los que pudo haber trabajado? (lo cual no sería una novedad si recordamos que en el 2009 a espaldas del Bayern concertó una entrevista con el Süddeutsche Zeitung en la que criticó a las directivas del club y su política de fichajes, lo cual le valió la multa más grande pagada hasta ahora en la historia de la Bundesliga)

¿Cálculo o error de cálculo?

Estoy seguro que en este caso se trata de ambos: Lahm sabe que persigue con el libro y sus declaraciones, pero con lo que no contaba el capitán de la selección es que la gente a su alrededor es menos tonta de lo que él cree.

Freitag, 26. August 2011

La “explosiva” autobiografía de Philipp Lahm

Se llama “La sutil diferencia” y se empezará a vender en Alemania este lunes. Desde hace unos días ocupa al mundo del fútbol en Alemania por sus “explosivas” revelaciones que en primicia publicó el diario Bild. Aquí se las entrego yo en español, así como son, sin comentarios.

Sobre el ex entrenador de Alemania y el Bayern Jürgen Klinsmann

“Klinsmann llegó al Bayern con el aura del héroe del 2006, como símbolo de que el club estaba entrando en el futuro y no tenía miedo de cambios estructurales. Pero el experimentó fracasó, con él sólo entrenábamos condición física, las charlas tácticas demasiado cortas y nosotros, los jugadores, empezamos a reunirnos por iniciativa propia para decidir cómo jugar los partidos. Después de 6, 8 semanas, ya sabíamos que con Klinsmann no íbamos a ningún lado, la temporada se limitó a reducir los daños hasta su despido”.

Sobre Felix Magath

“Magath trabaja con presión y deja a los jugadores en la incertidumbre sobres si cuenta con ellos o no, de esa manera extrae lo máximo de cada uno de ellos. Para los futbolistas eso es muy exigente y llega un momento en el que ya no están de lado del entrenador porque ya no les impresiona, sus trucos dejan de funcionar porque ya se les conoce”.

Sobre Louis van Gaal

“Él introdujo una filosofía de juego en el Bayern con la que tuvimos mucho éxito la primera temporada, pero no fue capaz de reconocer y eliminar sus fallas, por ejemplo aquella en el trabajo defensivo. El equipo jugaba ofensivo, convencido que los delanteros marcarían uno o dos goles por partido, y la que sufre es la defensa. En los entrenamientos dedicábamos mucho tiempo a la apertura del juego, tan pronto el arquero tenía el balón los centrales debían posicionarse en cada una de las esquinas del área creando un hueco de 40 metros entre ellos. Nunca se planteó la opción de que en esa acción se perdiera el balón, lo que en la temporada sucedió frecuentemente y facilitó los goles del adversario. Allí éramos muy frágiles. Van Gaal nunca dudó de si mismo ni de su sistema, pero los tiempos en los que un entrenador sólo habla con los jugadores para impartir ordenes pertenecen al pasado”.

Sobre el ex entrenador de Alemania Rudi Völler y la Euro 2004

“Me sorprendió la ligereza del entrenamiento: correr dos veces alrededor de la cancha, calentar, estiramientos, con la pelota en un circulo, luego un par de disparos al arquero, un par de centros, y un partido. Eso fue todo, y eso me pareció como si uno estuviera de vacaciones con un par de amigos, pero nadie decía nada, los experimentados cumplieron lo suyo y al entrenador todo le pareció en orden y bien. El primer rival fue Croacia, pero sobre el rival no hablamos, nadie conocía a esa selección, sólo a sus jugadores de la Bundesliga, nada mas; charla táctica, una estrategia de cómo jugar, tampoco, las únicas veces en las que Völler habló, que yo recuerdo, fue cuando daba a conocer la formación titular. La regla en esa selección era la despreocupación, se entrenaban un par de situaciones en centros, nada especial, y la cosa era divertida, sí, pero carente de sistema. A diario máximo se tenía una hora de entrenamientos, nada de análisis de videos del rival, la verdad, nada de videos, lo único sobre lo que se conversaba era sobre errores que el entrenador había identificado, pero todo quedaba solucionado si uno decía que no los volvería a cometer”.

Sobre el actual entrenador alemán Joachim Löw

“Desde el primer entrenamiento él dejó ver que era un gran táctico, es muy interesante escuchar lo que él dice sobre cada posición, en especial sobre la forma cómo considera que deben ser interpretadas”.

Sobre la derrota alemana contra Croacia (2-1) en la Euro 2008

“Estábamos jugando tan mal que al entrenador no le quedaba otra que introducir modificaciones drásticas, sacó a Marcell Jansen y me envió de lateral izquierdo, lo cual en mi opinión era tan difícil en pleno partido como cambiar en el tráfico de Londres un auto con el timón a la derecha por uno a la izquierda. Nuestro juego mejoró, pero no lo suficiente, no jugábamos mal en una posición, jugábamos mal en todas, no existía un equipo solidario en la cancha, sólo discusiones y quejas. Al siguiente día nos sentamos a hablar pero pese a que era obvio qué jugadores estaban molestos con cuáles, nadie dijo nada; pese a todo por lo menos quedó claro que todos se necesitaban unos a otros”.

Sobre el gol de Fernando Torres en la final de la Euro 2008


“Lloré sentado en la cabina en la pausa, peor no podían ser las cosas, semejante error y no poder seguir jugando para corregirlo y ayudar…”

La suerte (¿suerte?) alemana en Champions

Ya se conocen los rivales de los tres equipos alemanes en la fase de grupos de la Champions League y yo, muy optimista, estoy convencido que la fortuna les volvió a sonreír. Claro, al Dortmund mucho más que al Bayern, y al Bayern mucho más que al Leverkusen, pero todos tienen opciones reales de pasar a octavos.

En el grupo A Bayern se medirá contra el español Villarreal, el inglés Manchester City y el italiano SSC Napoles. Los del City son los verdaderos rivales por el primer puesto, su plantilla (en especial la ofensiva) es tan amplia como la chequera de sus propietarios (Dzeko, Agüero, Ballotelli, Silva, etc) y sus aspiraciones tan grandes como el ego de todos sus integrantes juntos. Atacando tal vez sean una maquina de gran potencial, pero siempre que les permitan desarrollar su juego, y aquí es donde los de Múnich tienen una gran ventaja con su experiencia en este tipo de competencias, con su continúa presencia en la Champions el Bayern debe estar en capacidad imponer las condiciones y manejar los ritmos, en caso de no lograrlo le debe alcanzar por lo menos para terminar segundos detrás de los ingleses.

Villarreal, con Rossi y Nilmar, tiene una delantera de lujo, con Senna en el medio un curtido jugador; lo mismo vale para los de Napoles con el uruguayo Cavani y el argentino Lavezzi en el ataque. Ambos hacen del grupo A uno atractivo a seguir, pero sus aspiraciones dependen de una sorpresa, de que tanto alemanes como ingleses tengan dos jornadas “negras” en serie, algo que seguramente el muy motivado Bayern, que quiere jugar la final el 2012 en su estadio, no concederá. (Ni hablar de los del Manchester City, que lo darán todo por demostrar que son la potencia europea emergente)

En el Grupo E Leverkusen
enfrenta al inglés Chelsea (máximo favorito a cerrar de primero y pasar a octavos), el español Valencia (su verdadero rival por el cupo) y el Genk belga. El equipo alemán de Robin Dutt disputará el segundo puesto (fue al club alemán al que más difícil le tocó, y digo difícil comparándolo con el grupo del Bayern, que es muy competitivo pero donde se pasará) en España. Al Chelsea se le puede robar uno que otro punto, contra el Genk existe la obligación de sumar, pero contra el Valencia hay que ganar uno de los dos partidos sin encajar goles. Así de simple es la ecuación de paso del club alemán para el que, en mi opinión, el torneo llega por lo menos seis semanas demasiado temprano pues aún faltan muchos mecanismos del nuevo entrenador por ser asimilados. Si el crecimiento por lo menos es constante, se puede lograr aunque si me preguntan hoy, es el único representante de la Bundesliga al que veo desde ya en serio peligro de despedirse de la Champions.

En el grupo F Dortmund
tiene de rivales al ingles Arsenal, al francés Marsella y al griego Olimpiakos. Los alemanes están muy por arriba de los franceses y los griegos (todo esto en el papel) y si no se tuviera en cuenta el peso de la experiencia en Champions, hasta se le podría poner por lo menos de igual a igual con el club de Londres. No hay motivo para preocuparse, jugando como lo viene haciendo el Dortmund debe pasar a octavos de final.

Dienstag, 23. August 2011

Zúrich cree en milagros, Bayern en lo terrenal

Para los suizos la derrota de la semana pasada, (0-2) en el Allianz Arena de Múnich, es motivante, un resultado que en sus propias palabras “permite soñar”. El Bayern, en cambio, no sueña, lo suyo es alcanzar la fase de grupos de la Champions League a como dé lugar. El peligro radica en creer que el 5-0 contra el Hamburgo, el fin de semana en la Bundesliga, es la nueva cara de la realidad del equipo, que no lo es.

El FC Zúrich, tras lo exhibido en el partido de ida de la ronda clasificatoria a la Champions, no hace mal en “soñar”, al fin y al cabo eso es lo único que puede hacer un equipo con tan pocos recursos futbolísticos, que pese a ser muy ordenado carece de varias de las más importantes características de un triunfador: valor, atrevimiento, entrega.

No en vano en Suiza hablan de un “milagro”, pues su clasificación a la Champions no sería otra cosa que eso, un milagro. Pero el “milagro” puede ser el comportamiento del Bayern, que en los 5 partidos oficiales de la temporada ha oscilado entre brillante y paupérrimo. El equipo ha evidenciado estar aún atrapado entre dos eras: la de van Gaal y la que está embocando Jupp Heynckes.

Los de Múnich se mueven entre el pasado y el futuro; su presente es aún difuso, falto de perfil, inestable y difícil de descifrar. La goleada propinada al Hamburgo es traicionera porque permite elogios que sólo resultan de las debilidades del rival y no de las propias fortalezas.

El directivo bávaro Karl-Heinz Rummenigge es conciente de esta situación, por ello advierte antes del partido en Zúrich: “no podemos cometer el error de presentarnos de forma arrogante creyendo que ya estamos clasificados”.

Él también pone los pies en el suelo hoy, cuando el Bayern aún no está clasificado para la Champions, y aclara que el propósito de llegar a la final del torneo, que se juega en el estadio de Múnich en el 2012, es algo que actualmente es casi imposible: “en Europa hay equipos que juegan un fútbol fantástico, por eso quiero pisar el freno del entusiasmo”.

Hace bien, el proceso del Bayern está empezando, es alentador, pero no puede prometer cosas tan grandes, hay que ir paso a paso, y el de esta noche en Zúrich apenas confirmará el ascenso del primer escalón de la empinada escalera que debe subir.

Eso si no da espacio a “milagros” suizos.

Montag, 22. August 2011

Así lo quiere Raúl

Pero las directivas del Schalke, y en especial su entrenador Ralf Ragnick, deseaban otra cosa, no en vano emprendieron en contra del español una cacería de muy mal gusto que al final no les funcionó, para bien de la Bundesliga.

Lo acontecido en Schalke, donde los últimos 10 días se hizo todo lo posible para mostrarle a Raúl que es más tolerado que deseado (por el cuerpo técnico), fue denigrante y no le hace honor a los méritos de la más grande estrella de habla hispana que ha llegado al fútbol alemán.

Para ejemplificar mejor la situación, vale la pena compararla con lo que está pasando hoy en el Colonia alrededor de Podolski, pretendido por el Galatasaray de Turquía. Allí las directivas del club dijeron “¡NO, AQUÍ SE QUEDA!” sin parpadear demasiado; el jugador de la selección alemana ha guardado silencio, a él no le toca hablar cuando el equipo demuestra así, abiertamente y sin tapujos, su deseo de conservarlo.

Pero en el caso de Raúl el Schalke le pasó constantemente la “papa caliente” al español; a un “lo que queremos es que se quede” le siguió el “pero él tiene que decidir”. Los alemanes no le cerraron la puerta a los del Blackburn Rovers cuando ofrecieron por su ficha, por el contrario, le abrieron la puerta al jugador para que se fuera, y luego, tras la penosa derrota en Finlandia, ante el Helsinki por la Liga de Europa, desarrollaron la maquiavélica estrategia de no confrontar sus propias incapacidades sino que trasladaron todo al bando del español, cuya situación causaba intranquilidad en el equipo (según dijeron) y por lo cual era necesario que “Raúl a más tardar el domingo, antes del partido contra el Mainz, nos diga definitivamente cuál es su futuro”.

Yo aquí ya expliqué por qué el entrenador Ragnick no es el mejor amigo de Raúl (léanlo aquí), pero que sus deseos de deshacerse de él lleven al Schalke a tomar un camino indigno en contra de un jugador al que se le podrá acusar de todo menos de ser un gran profesional.

Ragnick, tras la decisión oficial de Raúl (“me quedo en Schalke y cumpliré mi contrato”), se ve obligado a hacer algo que pudo haber hecho desde el principio, ahorrándose (ahorrándonos a todos) ese tira y afloja en torno al futbolista, y es aprovechar al máximo las cualidades, el talento y la sabiduría del español.

Raúl se queda en Alemania sabiendo que la afición lo adora, y que el cuerpo técnico intentó deshacerse de él de una manera poco elegante, más pensando en su familia (que está muy a gusto en Dusseldorf) que en sí mismo.

Pero Raúl también se queda en Alemania sabiendo que esa batalla contra Ragnick ya la ganó, porque con su fútbol y su entrega (ver el 4-2 del Schalke sobre el Mainz luego de un 0-2 en el primer tiempo) son las mejores armas. Los jugadores libran sus guerras en la cancha, y las ganan allí; el español lo sabe muy bien, el entrenador del Schalke parece aún no haber aprendido esa lección, pero está a punto de hacerlo, no tiene otra opción.

Donnerstag, 18. August 2011

Al Bayern aún le falta

Se le ganó 2-0 en casa al FC Zúrich en el primer partido por la clasificación a la fase de grupos de la Champions League. La tarea se cumplió y ya se tiene más que un pié puesto en la máxima competencia de clubes, nadie especula con la posibilidad –sólo matemática- de que los suizos anotarán, así jueguen en su estadio, tres goles. Sin embargo, el Bayern mostró más deficiencias que fortalezas, y eso –aunque a esta altura de la temporada no es preocupante- no satisface.

No es casualidad que los propios jugadores, al final del partido, reconocieran la pobreza de su juego ofensivo; y eso, cuando se gana, es un indicio claro de que las cosas no marchan bien. Que los propios integrantes de la plantilla del Bayern se den cuenta, y sean concientes de sus fallos, es positivo.

Arjen Robben, por ejemplo, se quejó de la “falta de agresividad” y la “poca constancia” en generar juego al frente, lo que impide que se “generen suficientes opciones de gol”. Bastian Schweinsteiger le respaldó cuando con una expresión de frustración en su cara dijo “esto es muy poco, a un equipo como el Zúrich hay que anotarle por lo menos cuatro goles pero ellos no se consiguen porque no se les sometió a una permanente presión”.

Los optimistas, aquellos que sólo quieren ver el resultado y las 4 ó 5 claras ocasiones (claras) de anotar, se dan por satisfechos. Los pesimistas lamentarán la carencia de resolución y el mayoritario circular del balón en horizontal.

Yo, que no soy (ni puedo ser) ni lo uno, ni lo otro, tengo que contarles que a este Bayern Múnich le falta, y que Arjen Robben y Bastian Schweinsteiger tienen razón. También tengo que decir que en el primer tiempo hubo 20 minutos de gran factura, y que en el segundo las cosas mejoraron ostensiblemente, pero no por ello despejaron las dudas.

El FC Zúrich, en el marco de una Champions League, fue el rival más inofensivo, tímido y respetuoso que he visto enfrentar al Bayern. En Múnich los suizos fueron durante largos pasajes del partido espectadores conformes, un equipo que rechazó el balón pero jamás lo disputó, que atravesó la mitad de la cancha en menos de 10 ocasiones.

A un contrincante de este formato, un club tradicional de Champions League como el Bayern está en la obligación de doblegarlo sin contemplación. Pero no, un gol tempranero bastó para calmar los ánimos, los bávaros se dieron por bien servidos con ese resultado transitorio (especialmente en el primer tiempo), y cuando marcharon al frente se les extrañó la decisión y la voluntad de anotar. Parecían marchando hacia el arco suizo más por inercia que por ganas de conseguir otro gol.

Mientras Schweinsteiger accionaba por todas las líneas y pedía el balón para distribuirlo –siendo el volante de contención designado- el encargado de generar el juego creativo, Toni Kroos, lució ausente. Esa es una de las grandes críticas a un excelente talento juvenil: su falta de presencia. El entrenador Jupp Heynckes le otorgó su confianza asumiendo que surtiría de ideas y pases verticales a Robben y Ribéry, pero estos dos tuvieron que encontrarse con la pelota usando sus propios medios, los servicios no llegaron.

Suena injusto responsabilizar a Kroos de la falta de dinámica del equipo, pero si el entrenador le asigna esa tarea de mover los hilos del ataque, los debe mover, y no a su ritmo, sino al ritmo que permite el rival (y el FC Zúrich permitió que se marchara con el turbo, lo que no se hizo) y exigen los colegas (Robben-Ribéry) que están en capacidad de aumentar las revoluciones del partido.

De otro lado, aunque se mejoró muchísimo con el ingreso de Thomas Müller, el goleador del Mundial 2010 aporta grandes cosas pero lo suyo no es generar ideas (aunque las tenga) sino desestabilizar y ofrecerse a lo largo de la línea de ataque como receptor o estación de una acción ofensiva.

Al Bayern le sigue faltando la verticalidad; se espera que Kroos la suministre (lo puede hacer, sin duda) pero aún no lo hace. Cuando se marcha al frente faltan las estaciones, el encargado de poner los pases allí no hace sentir su presencia ni reclama el balón para cumplir con su labor; por esta razón se opta por la horizontal, y la horizontal duerme hasta a los propios jugadores que la practican, debilita la concentración, crea una falsa comodidad y asesina la dinámica.

Este es el principio de temporada, veamos como se evoluciona en el Bayern porque evolución habrá, de eso no hay duda, al fin y al cabo se quiere llegar a la final de la Champions League del 2012 en Múnich, en el Allianz Arena, y se sabe que con el equipo actual ello no ocurrirá.

Mittwoch, 17. August 2011

Raúl se queda en Schalke, ¿pero hasta cuándo?

El club alemán le abrió la puerta de salida, el Blackburn Rovers de Inglaterra extendió una oferta, la súper estrella española no aceptó. Así se resume el capítulo más reciente de una historia que aún no termina.

El futuro de Raúl en Alemania sigue rodeado por la incertidumbre, si bien el delantero rechazó la opción de marcharse al fútbol inglés –por lo menos al Blackburn Rovers-, en el Schalke tampoco están seguros de que el español cumplirá su contrato, que se extiende hasta el verano del 2012. No en vano el director deportivo del club, Horst Held, dice “no tiene sentido detener a un jugador que no está contento”.

Aún quedan dos semanas hasta el 31 de agosto, fecha en la que se cierra el mercado de fichajes de futbolistas en Europa; hasta entonces las especulaciones en torno al futuro del “Señor”, como cariñosamente le llama la afición del Schalke, difícilmente cesarán. Por el contrario, ellas cada vez encuentran más motivos para circular.

El supuesto “descontento evidente”

A Raúl le han atribuido en Alemania un “evidente descontento” que no es otra cosa que el resultado de interpretaciones subjetivas de sus gestos y actitudes, tanto en los partidos como en las prácticas. Pero la verdad es que nadie sabe a ciencia cierta qué es lo que pasa por su cabeza pues ni en el club, ni en los medios de comunicación, hay quien tenga “línea directa” con el jugador.

Las directivas del Schalke conversan con él a través de su representante y/o su traductor, como ocurrió en el caso de la oferta del equipo inglés por su ficha; la prensa no tiene acceso a él, pero descifra sus miradas, su forma de correr, su actitud en los entrenamientos.

Incluso la celebración de sus goles es sometida a un intenso análisis. Así, el que consiguió el pasado sábado ante el Colonia, el que sentenció el 4-1 transitorio, un gol tan espectacular como atrevido, artístico y genial, fue desglosado hasta llegar a la conclusión que Raúl no se alegró, no festejó en la medida correcta, y que ello sucedió porque está “descontento” y se quiere ir.

Lo que sí es evidente

El entrenador del Schalke, Ralf Ragnick, se ha propuesto introducir esta temporada en el equipo una filosofía futbolística en la que el “tratamiento especial” del que gozó Raúl en la era de Felix Magath, quien lo trajo a Alemania, ya no tiene cabida. Declaraciones de Ragnick a la prensa local documentan su actitud frente al español: “conmigo a Raúl también le toca correr”; “Raúl es importante, pero aquí juegan once”; “si él se quiere ir entonces podemos hablar”.

El entrenador evade otorgarle a Raúl un absoluto respaldo (algo que sí le entregó Magath, incluso con prebendas y libertades extraordinarias), y al mismo tiempo continúa empujando movimientos en el mercado como la contratación del francés Nolan Roux, un futbolista para la posición del madrileño.

Las directivas del club, a través de su vocero deportivo Horst Held, tampoco han conducido una vía consecuente; a sus aseveraciones de “no querer dejar partir al jugador” se suman otras muy contradictorias como “no le pondremos piedras en el camino si decide irse”, o “él tiene que decidir qué quiere y decírnoslo”. Por su parte, Raúl también se ha marginado del colectivo: primero rechazó la elección de sus colegas de equipo como su representante ante el club, luego se ausentó –sin excusarse- de una sesión de fotos con la afición y fue multado por ello.

Todo sigue abierto

Las actividades del Schalke no se detienen, pero los rumores en torno a Raúl tampoco. Mientras el equipo alemán está en Finlandia, donde disputará este jueves (18.8.2011) el partido por la clasificación a la Liga de Europa, el español descansa en su casa en Dusseldorf pues se le descartó de la plantilla que viajó a Helsinki, para que -según la versión oficial- “se cuide y se prepare para el partido contra el Maguncia del fin de semana”.

Una decisión técnica como ésta, apenas unas horas después del frustrado traspaso al Blackburn Rovers, es por demás curiosa y abre espacio para que se siga especulando. Si Raúl jugara en Finlandia con el Schalke, se le cerrarían las posibilidades de hacerlo en el futuro con cualquier otro equipo en torneos internacionales (Champions League o Liga de Europa), lo cual reduciría ostensiblemente sus opciones de abandonar la Bundesliga.

En Alemania la conjetura sigue siendo: Raúl se queda, ¿pero hasta cuando?

Dienstag, 16. August 2011

Bayern va por el cupo en la Champions League

Animado por una victoria de último minuto en la Bundesliga sobre el Wolfsburgo; con todas sus estrellas a bordo, inclusive Arjen Robben; con el apoyo de su afición en Múnich. Para el Bayern sólo cuenta vencer al FC Zúrich.

El partido inicial de este miércoles (17.08) en la ronda de clasificación para la Champions League del Bayern, contra el FC Zúrich de Suiza, está planeado en Múnich como el primer escalón de ascenso que le lleve a la cúspide del torneo, que es –ni más, ni menos- el juego por la final que se escenificará en el 2012 en su estadio, el Allianz Arena.

Un opaco rendimiento debe alcanzar

En las dos primeras jornadas de la Bundesliga el Bayern aún no ha logrado desplegar todo el poderío que su famosa plantilla insinúa: una derrota en casa ante el Mönchengladbach (0-1), y un triunfo en el último segundo del partido ante el Wolfsburgo (1-0), han generado muchas dudas sobre el verdadero estado del progreso de un equipo que la temporada pasada decepcionó y con mucho esfuerzo alcanzó la tercera plaza del campeonato local, la que le permite disputar una plaza en la Champions League en la ronda de clasificación.

El fútbol practicado por el actual equipo aún no se diferencia gran cosa del que impuso en su momento Louis van Gaal; los frecuentes pases horizontales, y el lento tránsito al frente de ataque –favoreciendo el dominio y el control del balón-, aún no reflejan la filosofía de juego que quiere introducir el entrenador Jupp Heynckes.

En el club de Múnich se extraña la verticalidad, el desdoblamiento masivo de sus líneas y la veloz transición de ataque a defensa, y viceversa, todas ideas pregonadas por el nuevo cuerpo técnico. Aún así, pese a que el Bayern todavía se encuentra en una fase de adaptación que le resta brillo a su fútbol, su experiencia debe ser suficiente para derrotar a un equipo suizo como el FC Zúrich, que no pertenece a la élite del balompié europeo.

Con todas sus estrellas

Y aunque jugadores de gran vocación ofensiva como el lateral brasileño Rafinha, o el mediocampista francés Franck Ribéry, todavía no han conseguido aportar el máximo de su talento, es poco probable que el FC Zúrich dé una sorpresa. El club suizo se ha enfrentado en 11 ocasiones a equipos alemanes y ha caído derrotado en 8 de ellas, la última en la Copa UEFA del 2008/2009 contra el Hamburgo, donde entonces jugaban dos futbolistas actuales del Bayern: Ivica Olic y Jerome Boateng.

Otro argumento a favor de los bávaros es que llegan al importante partido de la ronda de clasificación de la Champions League con todas sus estrellas a bordo. Ribéry está en plena forma; Arjen Robben se recuperó a tiempo de una leve molestia en la espalda y estará en la plantilla; el resto de las figuras (el goleador de la Bundesliga Mario Gómez, el capitán Philipp Lahm, Bastian Schweinsteiger, Toni Kroos, Luiz Gustavo, etc) no acusan problemas físicos y están a disposición del entrenador Heynckes.

Por los lados del Zúrich

Lo mismo no se puede decir del rival suizo, que llegará a Múnich con tres bajas sensibles en el mediocampo: Xavier Margairaz, el tunecino Chakher Zouaghi, y Stjepan Kukuruzovic, quien se lesionó en el partido de la liga local el domingo. El FC Zúrich, equipo que en el duelo contra el Bayern no es favorito, viene a Alemania, pese a los problemas de plantilla, con gran confianza pues ha ganado sus últimos dos partidos en la liga local luego de haber perdido los tres primeros de manera consecutiva.

Además, el FC Zúrich no se resigna a ser simplemente el “trampolín” del Bayern a la Champions League y recuerda que hace dos años, en la misma competencia, le amargó el camino al AC Milán al vencerlo en su estadio por 1-0 para luego robarle un punto en casa tras empatar 1-1. De todas formas, en aquella oportunidad, los italianos pasaron a la siguiente ronda mientras los suizos se quedaron en el camino, algo que el Bayern espera se repita.

Ballack vs Rolfes

Esta historia, que bien podría titular “el peso del pesado” (por lo parsimoniosos y arrastrados movimientos de Michael Ballack en la cancha que lo hacen lucir como si cargara a sus espaldas el lastre que es él mismo), es una de esas que despiertan demasiadas emociones entre los fieles seguidores del ex capitán de la selección alemana. Pero ello no cambia para nada el tono de la realidad: Rolfes debe ser titular.

Para quienes admiran a Ballack (por lo que fue, pues no me puedo imaginar que lo hagan por lo que es hoy) en el mundo de habla hispana, es reconfortante informarles que no están solos. En el estadio de Leverkusen, el domingo, las tribunas temblaron al darse a conocer por los parlantes la formación inicial del equipo: Ballack de titular, y además con el brazalete de capitán.

Aplausos, abrazos entre vecinos de sillas (cómo si una voz celestial hubieran anunciado la redención de todos los pecados para la humanidad), lágrimas sinceras… muy emocional la bienvenida de Ballack a la plantilla titular.

Robin Dutt, el entrenador del Leverkusen, anunció previo al partido contra Bremen del fin de semana, que en su mediocampo no hay espacio para que Michael Ballack y Simón Rolfes (el capitán verdadero, el oficialmente designado) jueguen juntos; eso significa que uno va a la cancha y otro va a la banca. Y como durante la semana el segundo había formulado una crítica constructiva (que no fue bien recibida por el cuerpo técnico) al funcionamiento de su equipo en la derrota ante el Mainz, en el primer partido de la temporada, pues el que se quedó en la lista de suplentes fue él.

Así las cosas, Ballack jugó, el público se alegró, y el entrenador se apegó a su máxima. Pero lo de Ballack en el primer tiempo (las estadísticas del segundo ni las menciono para no hacerlo quedar aún mucho más mal) se redujo a 29 contactos con el balón, el 80% de sus duelos perdidos, y ninguna participación en aquellas jugadas de su equipo que terminaron con un disparo a puerta.

Como ya dije, Ballack se arrastró (a sí mismo) en la cancha, y cuando por fin fue retirado (en el minuto 84, a seis de terminar el partido con un empate 0-0 que no le servía para nada al Leverkusen, mucho menos al entrenador Dutt, cuya posición se habría tornado muy incómoda) la tribuna volvió a aplaudirlo, con calidez y respeto, pero no en reconocimiento a su rendimiento sino más bien como agradecimiento a su presencia.

Y llegó Rolfes, y con una enérgica acción, rescatando del borde de la línea final del terreno de juego un balón que ya se daba por perdido, sirvió un pase que dejó en solitario a Kadlec en posición de anotar. 1-0 a favor de Leverkusen, un gol que es ¾ obra de Rolfes, y el entrenador Dutt salvado de un inminente debacle.

¿Y qué hace Dutt al termino del partido? En vez de agradecer, o por lo menos reconocer, el extraordinario rendimiento de Rolfes, se ratifica en aquello de “jugará sólo uno” para terminar elogiando a Ballack.

Desde la perspectiva del entrenador el aporte del ex capitán de Alemania radicó en su “liderazgo” en la cancha, “la forma como condujo al equipo”.

Yo me preguntó desde aquí, luego de haber presenciado el partido en vivo, haber hablado con sus protagonistas, evaluar el rendimiento de Ballack y Rolfes, ¿es Leverkusen un equipo de fútbol donde lo deportivo pesa, o es un rebaño –de jugadores- que necesita de un pastor?

Si es lo primero, entonces que juegue Rolfes, se lo merece; si es lo segundo, entonces Ballack se quedará con la titularidad.

Donnerstag, 11. August 2011

El nuevo 4-1-4-1 de Alemania

El amistoso Alemania – Brasil de anoche, independientemente del resultado (3-2) y del momento futbolístico de los sudamericanos, fue un banquete para los dueños de casa en el que el entrenador Joachim Löw se atrevió a probar un nuevo concepto que funcionó y -aún mejor- lució tan pero tan bien, (todo un éxito) que de su selección sólo resta esperar títulos porque el nivel exhibido fue inmenso.

Löw venía formando un 4-2-3-1 con el doble pivote conformado por Bastian Schweinsteiger y Sami Khedira; a esa fórmula se aferró hasta cuando surgió un jugador espectacular llamado Mario Götze al que cualquier entrenador inteligente (y el alemán lo es) quiere poner de principio a fin.

El problema que se planteaba era responder a las preguntas cómo y dónde integrar al juvenil del Dortmund, pues con dos de contención en la mitad, y Mesut Özil sembrado (así debe ser) sólo quedaba la opción por los flancos, donde Götze rinde, sin duda, pero lo suyo es accionar mucho más central de tal forma que sus espacios de movilidad sean muchos más amplios, y por ende sus libertades.

Khedira (y Özil, lo conté ayer) no fue convocado de común acuerdo con el Real Madrid. Para su puesto al lado de Schweinsteiger el entrenador Löw tenía suficientes opciones, todas muy buenas (en mi opinión un par mejor que Khedira), como Sven Bender, Ilkay Gündogan o Simon Rolfes.

¡Pero todos ello se quedaron en el banco! El que jugó fue Toni Kroos.

Götze, ya se sabía, ocupó la plaza de Özil como conductor de los hilos del equipo nacional de Alemania; pero Kroos, contra todos los pronósticos, no fue socio de Schweinsteiger sino del juvenil del Dortmund. ¡Qué genial movimiento de sus piezas hizo Löw! Planteó contra Brasil (ojo, no contra Azerbaiyán, o Austria, o Kazajstán, no, ¡contra Brasil!) un ofensivo 4-1-4-1 con dos medios creativos llenos de ideas y ganas (Götze –Kroos) y dos por bandas (Podolski y Müller) que no sólo defendían en su propia línea sino también en las diagonales internas al hacer los regresos.

Señores, si no vieron el partido no saben de lo que se perdieron. Esa dupla Götze-Kroos armonizó de manera espectacular, se entendió a las mil maravillas, se juntó para jugar entre sí, o para poner a jugar a los demás. De Götze se esperaba este rendimiento, pero ver a Kroos fue gratificante, una especie de redención de un enorme talento victima de sus propias cualidades.

El del Bayern regularmente termina ahogado en su flexibilidad, producto de la capacidad de cubrir con propiedad todas las posiciones del mediocampo, lo que a veces hace que los entrenadores olviden que donde mejor rinde es como conductor. Löw no lo olvidó, pero también tomó en cuenta algo que sus colegas dirigiendo a Kroos desestiman: la necesidad de un socio.

Y Götze fue ese socio, aunque doy por descontado que esa pareja no será la que veremos en los torneos, allí el Kroos de anoche será Mesut Özil. Pero eso es sólo cuestión de nombres, lo importante es saber, como lo sabe el entrenador Löw -y desde ayer Alemania y el resto del mundo- que este 4-1-4-1 funciona, que el atrevimiento de poner a dos talentosos volantes juntos da resultados, que se gana muchísimo en control de balón y generación de juego ofensivo.

También importante…

…Lahm como lateral izquierdo: Löw reacciona al movimiento de su colega Jupp Heynckes en el Bayern y ubica a Lahm allí donde saltó a la fama (pese a no ser su banda natural). El lateral luce allí mucho más despierto, sus desbordes, interiorizando, aportan más al ataque, y el cambio sólo puede elogiarse.

…Mats Hummels va ganando la carrera por la titularidad en la selección al lado de Mertesacker. Ayer junto a un Holger Badstuber impecable, se destacó sobre éste con sus aportes muy efectivos a la apetura del juego ofensivo.

…Christian Träsch de lateral derecho, pese a no ser su puesto acostumbrado, convenció, especialmente teniendo en cuenta que poco o nada ha jugado allí. Buena opción.

…André Schürrle fue el gran ganador de anoche, en el segundo tiempo revitalizó el juego alemán aportando lo que se extrañó de Podolski: encarar el duelo 1 a 1, explotar en carrera a lo largo de la línea, juntarse con Götze y Kroos.

Mittwoch, 10. August 2011

Lo que hay que ver de Alemania en el partido contra Brasil

Mi intención aquí es presentarles algunas recomendaciones sobre los aspectos claves a apreciar en la selección de Alemania esta noche en el partido amistoso contra Brasil. De esta forma no se pierden lo verdaderamente importante y de paso pueden disfrutar viendo el progreso y la constante renovación de los alemanes.

1. Los defensas centrales


De la pareja mundialista hay uno que ya prácticamente está por fuera de la selección (Arne Friederich) por culpa de las lesiones y la edad (no es que sea viejo, es que es ya “mayor” y hay mucho joven empujando en esa posición) y otro que está “fijo” pero no irremplazable (Per Mertesacker, quien esta vez no fue invitado porque recién se reintegró a su equipo el Bremen luego de una larga baja).

Contra Brasil aparecen en la nomina 4 centrales (Jerome Boateng, Benedikt Höwedes, Mats Hummels y Holger Badstuber) y todos tendrán la opción de jugar esta noche en esa posición. Ante la ausencia de laterales es muy probable que a uno, o dos de ellos, les toque pasar a defender la banda, y ello muy probablemente recarga en el nuevo central del Bayern Boateng y quizás Höwedes, por lo que en ambos casos la oportunidad de formar en sus puestos naturales es decisivo, de cómo lo hagan dependerá si seguirán siendo considerados para jugar allí. Hummels y Badstuber, por su parte, le apuestan a la posibilidad de establecerse como la pareja definitiva de Mertesacker.

2. Los laterales

Ùltimo llamado para Denis Aogo, quien ante la no convocatoria de Schmelzer del Dortmund, así como la ausencia en la nomina de otros laterales de peso (Christian Träsch no ocupa esa posición pese a haber sido invitado para ella), recibe un espaldarazo del entrenador Löw que tiene que aprovechar. De lo contrario el entrenador de Alemania tendrá que seguir devanándose la cabeza con un problema que parece ser eterno, y la verdad el único que tiene con miras a la Eurocopa 2012 pues por todos lados surgen talentos, menos allí.

3. El número 2 del “doble 6”

O dicho en otras palabras, el rival por la posición de Sami Khedira (quien de común acuerdo con el Real Madrid, al igual que Mesut Özil, no fue llamado) ya que el primer “doble 6” está plantado: Bastian Schweinsteiger.

Sven Bender, Ilkay Gündogan, Simon Rolfes y Toni Kroos aspiran al puesto. Kroos probablemente sea titular hoy, pero su papel será casi con seguridad, en el futuro, el de reservista de lujo al que se utilizará de manera flexible en distintas posiciones del medio dado. Rolfes está camino de cumplir cada vez menos un rol destacado en la selección. Quedan Bender y Gündogan, una competencia de gran interés, el primero es mucho, mucho mejor defendiendo y entregando, pero el segundo tiene a su favor que así como es de bueno en la contención (y es muy bueno) lo es también en el desdoblamiento ofensivo y en el acompañamiento de acciones de peligro al frente.

4. Mario Götze

En este amistoso en Stuttgart, ante la ausencia de Özil, la joya juvenil del Dortmund ocupara su puesto natural por detrás del delantero como punta de lanza del medio, desde donde moverá los hilos del ataque. Götze es una alternativa muy diferente a la del jugador del Real Madrid pues su presencia al borde del área es mucho más incisiva y su accionar tiene mayor dinámica que aquella que le imprime Özil. A futuro no será el uno o el otro, sino juntos, y ese es un reto grande para Joachim Löw que tendrá que ingeniárselas para encontrar como acomodar esa fórmula, especialmente porque ello dejaría por fuera a uno de los medios que va por las bandas.

5. Los aleros

Thomas Müller y Lukas Podolski son inamovibles. No hay de otra, así es. ¿Pero entonces qué hacer con André Schürrle y Marco Reus? Ellos jugarán contra Brasil, y de cuán bien lo hagan dependerán sus posibilidades a futuro de ser alternativas para los dos que están fijos y en sus puestos son casi perfectos (OK, Podolski aún podría hacer más en el trabajo defensivo). Además, Schürrle y Reus deben lucirse, allí empujan el mismo Kroos, Marco Marin, Lewis Holtby, etc, etc.

P/S:
El delantero seguirá siendo Klose, con la tarea de facilitarle a Mario Gómez la sucesión. Cacau jugará hoy, es su estadio y contra su país natal, pero sus posibilidades de ser titular alguna vez son mínimas, las de quedarse en el seno de la selección alemana, en cambio, son enormes.

Dienstag, 9. August 2011

Alemania – Brasil: ¿importante para quién?

Aunque es un partido amistoso de mucho prestigio, el Alemania – Brasil del miércoles 10 de agosto en Stuttgart no es para todos los involucrados igual de relevante. Aquí les cuento para quién sí lo es, y para quién no.

¿Importante para los equipos?

Para uno más que para el otro
. Mientras los alemanes se encuentran en un proceso de constante progreso con su selección, los brasileños darán en Stuttgart el primer paso en dirección a una necesaria “reinvención” de su fútbol, en especial luego de su frustrante participación en la Copa América, y teniendo en cuenta su obligación de llegar lo mejor posible a la única competencia internacional que disputarán en los próximos 30 meses: el Mundial 2014, que se llevará a cabo en su país.

El duelo es, como se puede observar, mucho más importante para Brasil que para Alemania, a cuyo equipo –virtualmente clasificado para la Eurocopa 2012 y con excelentes perspectivas en materia de talentos- no se le exige un gran rendimiento a esta altura del año, recién empezada la temporada profesional local.

Los alemanes del entrenador Joachim Löw, sin el menor deseo de perder, se concentrarán mucho más en integrar al seno del equipo nacional a jugadores jóvenes sobre cuyos nombres construye el futuro: Mario Götze (Dortmund), Marco Reus (Mönchengladbach) y André Schürrle (Leverkusen) son los mejores ejemplos.

¿Importante para “amarrar” jugadores?

Claro que sí, basta ver las convocatorias.
Alemania invitó al juvenil talento de 20 años Ilkay Gündogan, actualmente al servicio del campeón de la Bundesliga Dortmund, cuyas raíces son turcas, al que quiere “atar” definitivamente.

Mano Menezes, entrenador de Brasil, convocó por su parte al mediocampo defensivo del Bayern Múnich Luiz Gustavo, quien hace pocos meses coqueteaba con la posibilidad de nacionalizarse alemán para poder jugar con la selección del país donde trabaja.

En ambos casos tanto Alemania, con Gündogan, como Brasil, con Luiz Gustavo, sientan un precedente y les comunican a los jugadores de forma clara “contamos contigo”. Por ser un partido amistoso, y no uno oficial, los futbolistas todavía podrían cambiar de bando (el primero a Turquía, el segundo con los alemanes), pero ya las dos selecciones les dejaron saber que las puertas están abiertas, para quedarse.

¿Importante para la Bundesliga?

De ninguna manera. De hecho, nada les gustaría más a los clubes alemanes que eliminar esta fecha del calendario internacional, y con razón, pues ella se presenta en medio de la primera semana de competencia local, lo cual frena su ritmo de adaptación.

En casos como el del Bayern, ello se traduce en una pausa total ya que el equipo aporta a selecciones nacionales 16 de sus 24 jugadores (8 a Alemania); para el Leverkusen y el Schalke, que iniciaron la temporada con una derrota, el tiempo se necesitaría para afinar el concepto futbolístico que aún no está maduro.

¿Importante para Cacau?

Para él más que para cualquier otro.
El delantero alemán nacido en Brasil, Cacau, es anfitrión del partido en el estadio de Stuttgart, donde su club juega de local.

No hay otro futbolista para quien este partido tenga una mayor carga emocional. El delantero del Stuttgart jugará en su ciudad, en el estadio del equipo del cual es capitán (como suplente del lesionado Matthieu Delpierre), y contra la selección de su país natal. El nacionalizado Cacau compró 60 entradas para el partido, para amigos y familiares, una prueba de cuánto significa para él este Alemania – Brasil.

¿Importante para la ciudad?

Enormemente. Basta decir que con este partido se inaugura internacionalmente la modernización y readecuación del estadio Mercedes-Benz Arena, hoy por hoy uno de los más espectaculares de Europa, con capacidad para 60.000 espectadores y comodidades en las que no se ahorró nada de los 40 millones de euro que se invirtieron. Allí se pensó en todo, incluso en los aficionados que van al sanitario, quienes podrán hacer sus necesidades sin perder un solo minuto de lo que acontece en la cancha, gracias a una ventana que les permite seguir viendo el partido mientras hacen aquello que se hace en el baño.

¿Importante para la Federación Alemana de Fútbol?


No sólo es importante, es histórico. Un único dato basta para ilustrar cuánto gana en reconocimiento el fútbol alemán internacionalmente con este partido: el Alemania – Brasil será transmitido en directo, por televisión, en 190 países. Un récord para la selección nacional.

Montag, 8. August 2011

El modelo en el que sobra Raúl

La derrota ante Stuttgart (0-3), en el primer partido de temporada, no es el verdadero problema que el ídolo español Raúl tiene con su equipo el Schalke. La verdad es que Raúl, personalmente, no tiene ningún problema con el Schalke, pero el Schalke sí tiene uno inmenso con él y ambas partes ya se dieron cuenta.

Como el tiempo se agota (el mercado de fichajes se cierra al finalizar agosto) están intentando -a la carrera- encontrar soluciones dignas para los dos.

El entrenador Ralf Ragninck está empecinado en imponer su idea futbolística en el club de Gelsenkirchen, lo cual es lo más lógico, y las dimensiones de la gran estrella internacional que es Raúl le ponen un obstáculo en el camino, le amarran una piedra al tobillo que no le permite tomar vuelo como lo desearía.

Ragnick, a diferencia del dinámico y compacto fútbol que estableció en Hoffenheim en el cual todas las líneas se movían sobre el balón, quiere esta vez en Schalke adaptar más un esquema que su ex asistente Mirko Slomka ha desarrollado con éxito en Hannover: tan pronto se entre en posesión del balón hay que generar, a gran velocidad, un desdoblamiento ofensivo que en cuestión de segundos coloque a uno de los nuestros en posición de tiro a puerta.

Aún más sencillo, lo que el entrenador del Schalke quiere es que cuando su equipo gane la pelota inmediatamente –sin mayor tránsito- esta aterrice donde un delantero –o medio- que disparará al arco. Suena como (y es) un gran planteamiento.

Pero aquí está el problema de Raúl, a quien el modelo no le va y de quien (tapándose la boca para que sólo escuche el interlocutor directo) se quejan en Gelsenkirchen por su movilidad, mejor dicho por lo que le falta de movilidad. Para lograr lo que quiere Ragnick se requiere un jugador como Ya Konan en Hannover, uno que viva de sus explosivas carreras, que dada la situación de juego acelere de 0 a 100 en segundos, un incansable atacante con el interruptor constantemente en “turbo”.

Por eso Ragnick a optado por retrasar a Raúl, por pedirle que más que irse al frente sea él el que ponga el balón al borde del área, algo con lo que el español no luce muy contento (y la verdad tampoco se toma la tarea en serio pues nominalmente es una cosa y en la cancha se comporta muy a la suya) y que tiene al entrenador entre la espada y la pared pues allí es el único lugar donde puede plantarlo ya que de lo contrario le tocaría sentarlo en la banca, un imposible dada no sólo la talla de Raúl sino el cariño y la devoción de la afición que –incluso entendiéndolo- no perdonaría una afrenta de ese calibre al “señor”.

Bajo Magath a Raúl no se le exigió nada y se le permitió jugar como quiso, el español era libre de dar lo que quisiera y pudiera (y fue un aporte enorme), se le entregó carta blanca para que basado en su experiencia y enorme calidad interpretara su papel en el equipo como mejor le viniera en gana (y de qué forma extraordinaria lo hizo). Tampoco era que el entrenador no comunicara sus decisiones o planteamientos, pero al español éstas les llegaban empacadas como diálogo de tú a tú, como intercambio de opiniones, nunca como ordenes o reglas a seguir.

Pero Ragnick quiere un equipo en el que todos jueguen a lo mismo, no uno en el que 10 se ajustan al plan y el 11 (en este caso el 7) se ajusta a él como mejor puede. Y Raúl pese a entender la situación no puede dejar de sentirse un poco fuera de lugar ante los cambios de perspectivas.

Por ello una posible transferencia suya sigue viva como opción, él lo tiene en sus manos y él puede decidir sobre su futuro. El Schalke está dispuesto a seguir cargándolo en la plantilla como símbolo de prestigio, así el desarrollo táctico se tomé más tiempo con él que sin él, y así se corra el riesgo de a la vuelta de unas semanas tener que enviarlo al banco de suplentes.

No en vano el español (pese a sus muy buenas excusas del manejo del idioma y tal) declinó representar a los jugadores ante las directivas del Schalke, ello le hubiera atado, le hubiera dado responsabilidades que es mejor no asumir antes que tirarlas en tres semanas. Raúl tiene 3 semanas para definir su futuro…

Freitag, 5. August 2011

“lo quiero ganar todo”

El nuevo lateral derecho del Bayern Múnich, el brasileño Rafinha, es el más importante fichaje latinoamericano de la presente temporada en la Bundesliga, a donde regresa luego de haber estado un año en el fútbol italiano.

Conversé con él acerca de las emociones que le generan estar otra vez en Alemania, con el Bayern, donde sin mayor esfuerzo conquistó la titularidad como defensa lateral derecho y jugará muy cerca de un viejo conocido suyo, el arquero Manuel Neuer, su ex compañero en el Schalke.

Rafinha, bienvenido de vuelta, ¿cómo se siente?

Estoy muy contento de volver a Alemania, un país que conozco muy bien y en el que tuve la oportunidad de jugar cinco temporadas con el Schalke. Aún más contento me pone que ese regreso a la Bundesliga se dé con el Bayern Múnich

Me contaron que mientras estuvo en Italia sintió siempre deseos de volver

No, no siempre. Ese año fue también bueno para mí, estuve muy contento en el Génova. En el equipo me ayudaron mucho y en Italia tuve mucho éxito. De todas formas no puedo ocultar que me emocionó mucho saber que regresaba a la Bundesliga.

Pero usted no sólo regresó a la Bundesliga, lo hizo al más famoso club de Alemania…

…Y eso es lo que me pone más contento, la combinación Alemania y Múnich es simplemente maravillosa. El Bayern es uno de los mejores clubes del mundo sólo comparable con Milán, con Barcelona, con Chelsea, con Real Madrid. Esos son los equipos de punta en Europa y estar en uno de ellos es emocionante; pero eso sí, para llegar allí hay que trabajar mucho.

Rafinha, usted se reencuentra en Múnich con un antiguo colega, el arquero Manuel Neuer con quien jugó en el Schalke. ¿Cómo le parece su progreso?

Manuel es un arquero excepcional y desde entonces, cuando jugamos juntos, hasta ahora, cuando nos volvemos a ver como compañeros, su evolución es evidente. Es un jugador de gran potencial que le va a ayudar muchísimo al Bayern en las próximas temporadas.

¿Se alegra de volver a jugar junto a Manuel Neuer?

Sí, sin duda, principalmente por el hecho de estar juntos en un equipo tan grande como el Bayern, y por saber que a su lado vamos a conseguir muchas victorias y muchos títulos.

En el pasado reciente se ha criticado mucho a la defensa del Bayern, el que se consideraba el punto débil del equipo. ¿Cree que con usted y Jerome Boateng los problemas están solucionados?

Espero que sí. Estamos trabajando muy fuerte para corregir eso, todos esos aspectos hicieron parte de los ejercicios de la pretemporada porque no queremos cometer los mismos errores que en el pasado. Nuestra defensa hizo una buena preparación y la expectativa es que eso se confirme con el correr de la temporada.

Es curioso, usted llegó y no tuvo mayores problemas en ser titular del equipo. ¿Contaba con esto? ¿Tuvo en algún momento dudas de que lograría imponer su clase en un equipo como el Bayern?

Yo confío mucho en mi trabajo y encaré esta venida al Bayern como una gran oportunidad, un gran sueño y un enorme desafío. Felizmente tuve un paso muy positivo por el Schalke, donde dejé una muy buena impresión de mis cualidades. Ahora todos confían mucho en mi trabajo y me respaldan; espero poder retribuir todo eso con un muy buen fútbol, siempre dando lo mejor de mí.

¿Cuál es su pronóstico para la temporada? ¿Se ganará la Bundesliga? ¿Se ganará la Copa Alemana? ¿Se ganará la Champions League jugando la final en casa, en el estadio Allianz Arena?

Soy muy optimista y mi expectativa personal –que responde a todas sus preguntas- es que lo quiero ganar todo con el Bayern. Sería algo mágico conquistar el título europeo de la Champions League jugando en el Allianz Arena.

Donnerstag, 4. August 2011

Gran previo de la Bundesliga 2011/2012

El reloj no se detiene, ya llega la hora, falta poco para que el balón empiece a rodar en la Bundesliga. Este es el momento para entregarles el más grande análisis previo sobre cómo llegan todos y cada uno de los equipos alemanes al arranque de la temporada.

¡Aquí está!

Dortmund

Las virtudes que le valieron la obtención del título (espíritu de grupo, gran disposición física a lo largo del partido, presión al balón a lo largo de todo el partido, veloz transición de defensa a ataque y viceversa, y libertad para las genialidades individuales) se mantienen intactas.

La partida de Nuri Sahin -rumbo al Real Madrid- no se sintió en la pretemporada y tampoco hay razones para pensar que se lamentará a lo largo del torneo. De hecho, el principal problema del entrenador Jürgen Klopp (si se le puede denominar así) será la administración de la abundante oferta de talento con la que cuenta en el mediocampo (Götze, Kagawa, Leitner, Gündogan, Kehl, Bender, Großkreutz, Perisic…).

Otro gran argumento a favor del campeón alemán es que el “fino olfato” a la hora de adquirir nuevos refuerzos, y de integrarlos con propiedad al concepto, es constante. El éxito obtenido la temporada pasada con el japonés Kagawa y los promovidos desde las divisiones inferiores (Großkreutz, Götze) parece que se repetirán con fichajes y ascensos como el de Löw, Gündogan y Bakalorz.

La sólida defensa está intacta y se amplió, el medio se enriqueció, la delantera parece ser la única que pueda sufrir un poco con la baja hasta mediados de septiembre del paraguayo Lucas Barrios, lesionado en la final de la Copa América, pero Lewandowski y Zidan deberían ser suficiente alternativa.

El Dortmund está para dar la pelea por la defensa del título y llegar lejos en la Copa Alemana, así como cumplir un papel destacado en Champions League. El secreto radicará en la forma en la que asimilen el exigente ritmo de competencia cuando se disputan 3 trofeos paralelamente.

Leverkusen

Con un entrenador nuevo, Robin Dutt, al que el tiempo aún no le ha alcanzado para transmitir su concepto táctico; sin defensas centrales de jerarquía (que sigue buscando y espera encontrar antes de que cierre el mercado de verano); con el vacío dejado por Arturo Vidal; con el lastre de tener a una “súperestrella alemana” en Michael Ballack para la que no tiene espacio; el futuro no luce (a corto plazo) muy prometedor.

El Leverkusen de la pretemporada, el que llega al arranque del torneo, depende demasiado del mejor jugador de su actual plantilla, Simon Rolfes. De su mano marcha el equipo, él es quien marca los ritmos, y el único destacado a esta fecha. OK, André Schurrle también ha mostrado lo suyo, también llega bien y promete cosas positivas, pero aún le llevará tiempo poder desplegar todo su potencial. Digno de mencionar, Sven Bender y su presente nivel de rendimiento, pues si (como es de esperar) aún puede mejorar entonces va a volar en este 2011/2012.

El club sufrirá en la primera parte del campeonato (internacionalmente también) para mantener el paso de los grandes en la Bundesliga, pero a partir de noviembre, o al regreso de la pausa invernal, tendrá que explotar si el grupo asimila la idea del nuevo entrenador y se solucionan los problemas puntuales de plantilla (defensa).

Bayern

¿Se criticó durante largo tiempo la defensa del club de Múnich? Pues bien, las directivas reaccionaron contratando al mejor arquero alemán y uno de los mejores del mundo, Manuel Neuer, así como a Jerome Boateng de central y a Rafinha de lateral derecho pasando a Philipp Lahm a la banda izquierda, donde se hizo famoso internacionalmente y se convirtió mundialmente en uno de los mejores en la posición.

¿Se miró con desconfianza la dependencia de la dupla Ribéry-Robben? Pues ahora hay alternativas con Thomas Müller y Toni Kroos (que pueden ir tanto por el medio detrás de Mario Gómez, como por las bandas), más el japonés Usami.

Además junto a Bastian Schweinsteiger se tendrán dos opciones de primer nivel: Luiz Gustavo y Tymoschtschuk. Al frente de todo el entrenador Jupp Heynckes, cuyo concepto es relativamente sencillo: a jugar con orden.

El Bayern no va a deslumbrar, lo suyo será un fútbol muy práctico ejecutado por figuras de gran talla. En Alemania peleará tanto los títulos de la Bundesliga como el de la Copa Alemana; internacionalmente va a dar una pelea a muerte por ser uno de los dos equipos que dispute la final en el Allianz Arena en Múnich, su prioridad 1A.

Hannover

La temporada pasada su principio de “10 segundos” (tiempo que debería transcurrir entre apoderarse del balón y un disparo al arco) le dio buenos resultados. El entrenador Mirko Slomka se mantiene fiel a él pero no por ello se engaña a sí mismo creyendo que el éxito del año anterior se repetirá: la meta es terminar entre los 10 primeros de la Bundesliga.

El Hannover logró conservar en sus filas al muy pretendido Didier Ya Konan, así como a su colega en el ataque Mohammed Abdellaoue. Curiosamente el club se ha especializado en hacer sus descubrimientos de talentos en Noruega, de donde trajó a los dos ya mencionados y acaba de encontrar a Henning Hauger, que es defensa como lo es Christian Pander (ex Schalke), un talentoso lateral alemán, dueño por derecho propio de los mejores centros de la Bundesliga, que ha visto su progreso profesional traicionado por el cuerpo y las lesiones que han frenado la exhibición de su calidad.

El principio de los “10 segundos” funcionará muy bien en la Liga de Europa; en Alemania hay que darle la razón al entrenador Slomka, un puesto entre los primeros 10 es más que factible, la duda es cuál de ellos, yo descarto los dos primeros pero del tercero para abajo creo que tiene posibilidades.


Mainz

La buena noticia es que el entrenador es el mismo, Thomas Tuchel; la mala es que el entrenador casi empieza otra vez de cero tras la partida de varios de sus más importantes jugadores (Schürrle, Holtby, Fuchs) en la fenomenal campaña del torneo anterior.

Dos jugadores provenientes de la segunda división (Zoltan Stieber y Nicolai Müller) así como dos jóvenes pero ya curtidos futbolistas (Malik Fatih y Eric-Maxim Choupo-Moting), son los principales refuerzos. El objetivo con ellos es darle continuidad a la filosofía de Tuchel de “defender ofensivamente” y “poner muy rápido el balón al frente”.

Mainz esta temporada será un equipo de media tabla que dependerá mucho del gran talento estratégico de su entrenador.


Nuremberg

El riesgo de jugar con un equipo prestado es que tarde o temprano hay que devolverlo. Eso es lo que sucedió con el Nuremberg que tuvo que ver partir a Andreas Ottl, a Julian Schieber, a Mehmet Ekici, con destino a sus clubes de origen desde donde se les vendió a otros clubes (con excepción de Schieber).

Aún más triste es cuando se tienen grandes jugadores propios que luego de una buena temporada todos quieren en sus filas y el Nuremberg no puede retener por falta de perspectivas. Esa es la historia de Andreas Wolf y Ilkay Gündogan. La contratación (o mejor, otro préstamo) del ex Dortmund Markus Feulner (32 anos y autor de los 3 goles del triunfo del equipo en la Copa Alemana), del ex Hoffenheim Wilson Kamavuaka, y del goleador del Dinamo Dresden Alexander Esswein, son más un deseo de llenar los vacíos que una realidad.

El Nuremberg esta temporada estará mirando, como acostumbra, hacia la zona de descenso.

Kaiserslautern

Mejor no pudo haber terminado la temporada para los “diablos rojos” en el 2011, séptimos por encima de grandes como el Hamburgo, el Schalke, o el Wolfsburgo; lejos del descenso.

Pero sorpresas no se dan todos los años, y la sorpresa del pasado no fue lo bien que marchó el Kaiserslautern sino lo mal que anduvieron los grandes. En entrenador Marco Kurz es conciente de ello, así como lo es de que la perdida del goleador Srdjan Lakic (ahora en Wolfsburgo) y del mediocampista Jan Moravek (de regreso a Schalke) son difíciles de compensar pese al arribo de los jugadores de Israel Itay Shechter y Gil Vermouth , y de Richard Sukatu-Pasu.

El Kaiserslautern peleará contra el descenso.

Hamburgo


Este es el mejor proyecto del año y hay que decirlo desde antes de que el campeonato empiece para no perderse lo que pasará con el club del puerto. El director deportivo danés (que algunos consideran también entrenador a la sombra) Frank Arnesen, llegó del Chelsea con muchas ideas y un paquete interesante de jugadores (Töre, Mancienne).

El Hamburgo trabaja (y se le ha venido dando bien) por hacer de la unión y el trabajo colectivo su principal fortaleza y pondrá por las bandas ofensivas a dos de los más interesantes jugadores que verá esta temporada la Bundesliga (Elia y/o Jansen, que andan muy bien, y Sun). Triste es un poco la suerte de los latinoamericanos: el venezolano Tomás Rincón, pese a su buena Copa América, está lejos de la titularidad, y el peruano Paolo Guerrero (otro que brillo en Argentina 2011) irá al ataque en tanto la nueva contratación Skjelbred se adapta; claro, se se marcha Madlen Petric, como se especula, podría tener aún mejores perspectivas.

Este equipo póngalo entre los 5 primeros.

Freiburg

Dutt se marchó a Leverkusen y en su remplazo asumió el comando Marcus Sorg. Lo demás se mantuvo como venía, incluso se ha logrado retener en sus filas al goleador Papiss Demba Cisse pese a las tentativas de diferentes clubes importantes y prestigiosos.

El Freiburg se mantendrá fiel a su idea, y también a su tradición de disputar su permanencia en primera división.

Colonia


Este equipo, que va a pasarla tan mal como la pasa siempre, y seguirá considerando un éxito la posición 10, depende del jugador que en sus filas lleva ese número: Lukas Podolski. El de la selección alemana es el 85% del Colonia, lo bueno (y a veces lo malo) que se hace pasa por sus pies.

Claro, hay nuevo entrenador, Stale Solbakken, pero éste llegó con el plan de “desmontar” a la figura despojándole de la capitanía. ¡Como si en Colonia la popularidad y el cariño a Podolski dependiera de la capitanía y no de ser motor y conductor del equipo! También se contrató a Sascha Riether. De otro lado se conservaron a la mayoría de los jugadores.

La verdad no hay mayor cosa que decir del Colonia: anda bien Podolski, salva su cupo en la primera división; anda mal Podolski, desciende.

Hoffenheim

Su goleador, Vedad Ibisevic, está otra vez lesionado y será baja largo tiempo; el brasilero Firmino, por su parte, ya empezó a jugar regularmente y luce bien conduciendo el ataque del equipo.

Pero lo más importante este año en Hoffenheim será hacerle seguimiento a la primera etapa de un proyecto a largo plazo que va de la mano del nuevo entrenador, Holger Stanislawski (ex St. Pauli), en quien se tienen muchas esperanzas de que le imprima al club la dinámica que alcanzó con Ralf Ragnick.

El Hoffenheim no será protagonista de esta temporada, pero cumplirá sin duda una campaña más que aceptable que perfilará para mejores cosas. Con continuidad su año no es este, pero si el siguiente.

Stuttgart

William Kvist, Ibrahim Traore, el mexicano Maza y Julian Schieber son los refuerzos principales de un equipo que cuenta con un muy buen técnico, Bruno Labbadia, pero con una nomina a la que le falta calidad.

Al entrenador le tocará dar lo mejor de sí para sacar el máximo rendimiento a sus futbolistas y las directivas lo saben, no en vano la consigna oficial no tiene como objetivo “una posición determinada sino la obligación de presentarnos de la mejor manera posible”.

El Stuttgart tiene un pie firme en la mitad de la tabla.

Bremen

Es un tremendo desperdicio contar con jugadores del talento de Marko Marin, Arnautovic, Pizarro, ahora Ekici, Wesley, etc; saber que se tiene un entrenador de mucha sabiduría como Thomas Schaaf, y no sacar provecho de todo ello.

Pero así es la cosa en el Bremen, entre otras por las lesiones (Mertesacker que ya regresó), pero principalmente porque detrás de todo está la indecisión de la mesa directiva sobre el futuro, sobre si el entrenador seguirá al frente a partir de la próxima temporada (lleva ya más de una década en el banco), sobre si se necesita un nuevo aire, refrescar los puertos encargados de los éxitos deportivos.

Mientras esto no se soluciones el Bremen seguirá siendo lo que fue el año pasado: la suma de grandes individualidades sin coherencia colectiva. Se dejan de lado los temas extradeportivos para concentrarse en lo que debe suceder en la cancha, el Bremen está llamado a ser lo que ha sido en los últimos tiempos: protagonista de la Bundesliga y candidato al título.

Schalke

El proyecto es interesante, de ello no hay duda. Cuando uno revisa con atención lo que quiere sacar adelante el entrenador Ralf Ragnick, y además se percata de que el Schalke será el segundo equipo con el promedio de edad más bajo en la Bundesliga, sólo se puede tener esperanza en el futuro.

El problema es que el Schalke por ahora no tiene presente, o bueno, sí lo tiene, pero éste lleva una expresión en su rostro que denota dudas no resueltas y preguntas aún no contestadas. Claro, los azules pueden decir que empezaron bien la temporada ganando la Súpercopa al Dortmund, pero ellos saben, como lo saben quienes vieron el partido, que el triunfo fue un golpe de suerte y que aunque se luce mucho más ordenado tácticamente que el año pasado, aún se está lejos de contar con los elementos que le permitan proclamarse aspirante al título alemán.

La baja más importante en Gelsenkirchen fue el portero Manuel Neuer, bien suplido con Ralf Fährmann; de los otros que se fueron (Ali Karimi, Angelos Charisteas, etc) nadie se acuerda, pero eso sí, los que llegaron nuevos son verdaderos refuerzos (Lewis Holtby, Christian Fuchs).

El Schalke aún no sabe como jugar (¿4-2-3-1 con Raúl en el medio?, ¿4-4-2 con dos atacantes?) y en tanto no lo sepa eso se notará en su rendimiento en la Bundesliga; responde pronto a la pregunta puede pelear de mitad de tabla hacia arriba, se tarda y lo suyo será navegar por la zona media del casillero.

Wolfsburgo

Sin pies ni cabeza. El equipo de Felix Magath, que sigue su línea de comprar y comprar y comprar jugadores, no tiene estructura. El entrenador quiere jugar su favorecido esquema de 4-4-2 con Lakic y Mandzukic (Helmes) como la pareja sucesora de Grafite y Dzeko que le dio el título en el 2009, pero el principal problema para reeditar ese triunfo es la falta de un conductor; el Misimovic de aquel entonces no existe en la plantilla actual, primero porque el brasileño Diego se descalificó a sí mismo con su conducta y está a la venta sin posibilidades de jugar, segundo porque no se encontró otro jugador parecido en el mercado, aunque aún no se renuncia a la posibilidad de contratar para esa posición a Marko Marin.

Con Träsch se encontró por lo menos una pareja sólida para Josué en el medio defensivo, pero eso no es suficiente y la eliminación en la Copa Alemana frente al RB Leipzig develó todos los problemas estructurales que Magath tiene que resolver.

El Wolfsburgo, decepción en el 2011, tendrá que trabajar mucho para no repetir la experiencia en el 2012.

Mönchengladbach


Tres responsables de haber salvado el cupo en la primera división se quedaron en el equipo: el entrenador Lucien Favre, el fenomenal medio Marco Reuss, el central brasileño Dante. Eso es lo positivo.

Lo negativo es que por más que se quiera, ante la ausencia de recursos, el Mönchengladbach no podrá escapara a su suerte de pelear, una vez más, contra el descenso.


Berlín


Ya era hora que la capital alemana tuviera el club que se merece, que el Hertha hiciera “borrón y cuenta nueva” y presentara un proyecto serio. La amargura de gastar una temporada en la segunda división fue positiva y el entrenador Marcus Babbel le sacó el mayor provecho y estableció allí un gran colectivo que si bien no va a luchar en la primera división por el título sí debe mantenerse alejado del nerviosismo del descenso.

La llegada desde el Bayern del portero Thomas Kraft y el volante defensivo Andreas Ottl enriquecen la plantilla en donde se necesitaba, el liderazgo de Maik Franz (un incómodo jugador para los rivales por su constante espíritu de lucha), el creativo Raffael, dos volantes aguerridos como Fabian Lustenberger y Peter Niemeyer, y los delanteros Adrian Ramos y Pierre-Michel Lasogga son pilares de un equipo muy equilibrado en todas sus líneas.

El Berlín se quedará en primera.

Augsburgo


Otro proyecto que se lleva de forma ordenada y responsable de la mano del entrenador Jos Luhukay, quien cuenta con el respaldo incondicional de las directivas del club, que se aferran a él y no le presionarán por resultados dándole libertad para trabajar.

Lorenzo Davids, sobrino del legendario jugador holandés Edgar Davids, es la contratación más significativa; las bajas fueron mucho más sensibles, por ejemplo Moritz Leitner se fue a su club (Dortmund) e Ibrahima Traore al Stuttgart. En el club se toma el ascenso como un nuevo inicio, una experiencia que debe dejar cosas positivas.

El Augsburgo tiene cómo mantenerse en primera división si supera los nervios de “primiparo” y “novato”. Si la presión le traiciona será protagonista de la lucha por evitar el descenso.

P/S: Y para redondear este previo, aquí les dejo este link a En Línea de Gol donde hay una extensa entrevista sobre el tema.

Montag, 1. August 2011

Las sorpresas de la Copa Alemana

La Copa Alemana ha demostrado una vez más ser la competencia más entretenida del fútbol en Alemania, una en la que los chicos no respetan a los grandes. Leverkusen, Bremen, Wolfsburgo y Friburgo ya fueron eliminados.

Equipos aficionados, de la cuarta y la tercera división, así como la de ascenso, reciben la oportunidad de enfrentarse en la Copa Alemana a los clubes más prestigiosos de la Bundesliga. Para ellos esos partidos contra los “grandes” del fútbol alemán son el evento del año, una ocasión única que no desaprovechan. Los ejemplos actuales son RB Leipzig, Dinamo Dresden, Heidenheim y Unterhaching, verdugos (en ese orden) de Wolfsburgo, Leverkusen, Bremen y Friburgo.

De todas las sorpresas del fin de semana en la Copa Alemana la mayor, sin duda, fue la eliminación del actual subcampeón de la Bundesliga y representante de Alemania en la temporada de la Champions League que está por iniciar: Leverkusen, ex club del chileno Arturo Vidal.

El club de primera división se fue a la pausa con una ventaja 3-0 sobre el Dinamo Dresden, un rival al que cumplidos los primeros 45 minutos del partido consideró derrotado, un rival que aprovechó el descanso para alimentar sus esperanzas. El Dinamo, novato a partir de este año en la categoría de ascenso, consiguió, en contra de todos los pronósticos, una hazaña histórica al remontar el marcador –por primera vez en la Copa Alemana en los últimos 25 años- transformándolo en un triunfo 4-3.

Y mientras en Dresden celebraban, y preguntaban con sarcasmo ¿Champions League? ¿Qué es eso?, en Leverkusen emergieron las dudas sobre si el equipo está listo para competir en nombre de Alemania en el máximo torneo internacional de clubes. Especialmente irónico resultó que el subcampeón de la Bundesliga se desmoronó tras el ingreso a la cancha del ex capitán de la selección nacional, Michael Ballack.

Pese a las preocupaciones, en Leverkusen han optado por aplicar la sentencia “al mal tiempo, buena cara” y el entrenador Robin Dutt ha declarado que la eliminación de la Copa Alemana “quizás no es tan mala pensando en los otros torneos que tenemos que disputar”. Una actitud muy diferente asumió su colega del Wolfsburgo, Felix Magath, quien sin ocultar su frustración tras perder con el RB Leipzig (2-3) anunció que “habrá consecuencias”.

El equipo de Magath no sólo perdió contra un rival de la cuarta división, sino que los tres goles los anotó el mismo jugador, Daniel Frahn. El entrenador del Wolfsburgo, que tiene en sus filas al brasilero Diego a quien no dejará jugar y ha puesto a la venta, es conciente que su equipo fracasó en Leipzig por carecer de un mediocampista creativo que organice las acciones ofensivas.

Lo curioso es que Magath pretendería contratar, para solucionar ese problema, a uno de los protagonistas de la jornada inicial de la Copa Alemana 2011/2012, a la figura trágica a la que se le imputa en gran parte la eliminación del Bremen frente a un club de la tercera división, el Heidenheim.

Se trata de Marko Marin, quien cuando su equipo, el Bremen, ganaba 1-0 cobró un penalti que de haber convertido hubiera aumentado la cuenta a 2-0, liquidando prácticamente el partido a su favor. Pero el joven jugador falló, su lanzamiento fue detenido por el arquero y la historia del enfrentamiento por la Copa Alemana entre el club de primera división y el de tercera, cambió radicalmente.

En menos de 5 minutos, motivados por la atajada de su portero, los jugadores del Heidenheim, volcados masivamente al ataque, consiguieron dos goles. Con el pizarrón indicando un triunfo transitorio se parapetaron a defenderse de los ataques cada vez más desesperados del Bremen, que no consiguió reponerse y tuvo que conformarse con ser el perdedor de la contienda.

El Heidenheim de tercera obtuvo su paso a la siguiente ronda de la Copa Alemana, así como también lo hizo su colega de categoría, el Unterhaching, que venció al Friburgo de primera división por 3-2, en otra de esas sorpresas que ya son costumbre.

Esta vez Leverkusen, Bremen, Friburgo y Wolfsburgo fueron victimas de ellas; el Maguncia (contra Zweibrücken), el Augsburgo (contra Oberhausen) y el Hoffenheim (contra Windeck) estuvieron también a punto de despedirse eliminados del torneo, sus sufridas victorias las obtuvieron en el periodo de alargue.